“Nombre: Ulrike. Apellido:
Meinhof. Sexo: femenino. Edad: cuarenta y un años. […]
No, no estoy de acuerdo con
vuestra vida. No, no quiero ser una de vuestras mujeres confeccionadas y
envueltas en celofán. No quiero ser una presencia tierna con risitas y sonrisas
estúpidamente seductoras en vuestra mesa del sábado noche en un restaurante con
menú variado y exótico y con fondo de música idiota por hilo musical. Y tener
que esforzarme por estar en parte triste y pensativa y en parte loca e
imprevisible y después tonta e infantil y luego maternal y puta y luego al
minuto tener que reírme pudorosa en falsete tras de una de vuestras inevitables
ordinarieces. […]
Dormid, dormid, gentes bien
cebadas y atónitas de mi Alemania, y también vosotros de Europa, gentes
sensatas, ¡dormid serenos como muertos! Mi grito no puede despertaros…. No se
despiertan los habitantes de un cementerio.
Los únicos que sentirán crecer el odio y la rabia, lo sé,
serán aquellos que sudan y revientan en la sala de máquinas de vuestro gran
navío: los emigrantes turcos, españoles, italianos, griegos, árabes y las
mujeres, todas las mujeres que han comprendido su condición de sometidas,
humilladas y explotadas, ellas comprenderán también porque me encuentro aquí, y
porqué este estado ha decidido matarme….., exactamente como a una bruja en el
tiempo de las brujas. Y se convencerán, si no lo han hecho ya, de que el de hoy
sigue siendo tiempo de brujas para el poder. […]
Se prohíbe. Se prohíbe pensar,
imaginar, hablar escribir, se prohíbe todo. ¡Sí, se prohíbe todo!
Pero jamás podréis prohibirnos
que nos riamos de vuestra necedad….”
Monólogo:
Yo, Ulrike, grito….
Obra:
Ocho Monólogos
Autores:
Franca Rame y Darío Fo.
Cap comentari:
Publica un comentari a l'entrada